Tras sus investigaciones, Gregor Mendel
concluyó sus trabajos enunciando 3 leyes, consideradas a día de hoy la
base de la genética actual. Estas leyes, explican y predicen cómo serán
los fenotipos (caracteres físicos) de un nuevo individio. Habitualmente,
las leyes de Mendel también se han denominado como “leyes para explicar
la transmisión de caracteres” a la descendencia. De acuerdo a este
punto de vista, no sería válido considerar la primera ley de Mendel, o
ley de la uniformidad, puesto que la uniformidad de los híbridos que
Mendel observó no es más que la expresión del genotipo, una ley de
dominancia que poco o nada tiene que ver con la transmisión.
Así pues, hay 3 leyes de Mendel que
explican los caracteres de descendencia de dos individuos, pero
únicamente son dos de las leyes mendelianas las que se refieren a la
transmisión: la ley de segregación de caracteres independientes (segunda
ley), y la ley de herencia independiente de caracteres (tercera ley de
Mendel)
Primera Ley de Mendel: Ley de la uniformidad
Durante sus investigaciones, Mendel
utilizó distintas variedades de guisantes para sus experimentos. Estas
plantan reúnen una serie de características que resultan ventajosas en
estos estudios:
- Presentan características fácilmente distinguibles en su aspecto exterior
- Son vegetales con abundante descendencia
- Son vegetales fáciles de cultivar
- Sus flores se pueden autopolinizar y además permiten la polinización cruzada.
Las diferentes variedades de guisante
que empleó Mendel en sus trabajos, presentaban 7 características
fácilmente distinguibles, con 2 variaciones cada una:
- Forma: semilla lisa o rugosa
- Color de la semilla: amarilla o verde
- Color de la cubierta de la semilla: gris o blanca
- Forma de la vaina: lisa o arrugada
- Color de la vaina: amarilla o verde
- Longitud del tallo: largo o corto
- Posición de la flor: a lo largo del tallo (axilar) o en las puntas del tallo (terminal).
Tras obtener las líneas puras, Mendel
comenzó haciendo cruces monohíbridos, transfiriendo el polen de ciertas
plantas hacia plantas con la característica contraria. Siguiendo con el
ejemplo, llevando polen de plantas con semilla amarilla a polinizar
plantas de semilla verde.
Se conocen como generación progenitora o generación P a las primeras plantas que Mendel utilizó en sus cruces, y generación filial o F1 a sus descendientes.
Al cruzar la generación P, obtuvo sólo
plantas de un tipo en la generación F1, por lo que decidió llamar
caracteres dominantes a los que aparecieron en la F1, y caracteres
recesivos a los que no se presentaron en la F1. Tomando un ejemplo, al
cruzar plantas de semilla lisa con plantas de semilla rugosa, Mendel
observó que, en la F1, sólo se presentaron plantas de semilla lisa
(caracteres dominantes), y ninguna planta con semilla rugosa (caracteres
redesivos)
En resumen, establece que si se cruzan
dos razas puras para un determinado carácter (P) entre sí, los
descendientes de primera generación filial (F1) serán todos iguales
entre sí, con igual fenotipo y genotipo, e iguales en fenotipo a uno de
los progenitores.
Segunda ley de Mendel: Principio de la segregación de caracteres
El carácter hereditario que se transmite como una unidad que no se combina, se diluye o se pierde al pasar de una generación a otra, sólo se segrega o se separa.
También llamada Ley de la separación o de la disyunción de los alelos.
Los dos genes que rigen cada carácter no se mezclan ni se fusionan, sino que se segregan a la hora de formarse los gametos, teniendo cada gameto uno y sólo uno de los alelos diferentes.
Estas afirmaciones formuladas por Mendel
son consecuencia del avance de sus investigaciones. Mendel observó que,
cruzando entre sí a los elementos F1, o primera generación filial, los
individuos de la F2, o segunda generación filial, presentan pares de
alelos distintos, por lo que su genotipo ya no es uniforme como
resultado de las distintas combinaciones posibles de los genes.
En cuanto al fenotipo, por otro
lado, según se trate de herencia dominante o intermedia, las
proporciones resultantes son 3:1, en el primera caso, y 1:2:1 en el
segundo.
En palabras del propio Mendel:
Resulta claro ahora que los híbridos forman semillas que tienen el uno o el otro de los caracteres diferenciales, y de éstos la mitad vuelven a desarrollar la forma híbrida mientas que la otra mitad produce plantas que permanecen constantes y reciben el carácter dominante o el recesivo en igual número.
Tercera Ley de Mendel: Ley de la independencia de caracteres
También descrita en ocasiones como
segunda ley (si no se tiene en cuenta la primera), Mendel concluyó que
los diferentes rasgos son heredados de manera independiente entre ellos;
estos es, que el patrón de herencia de un rango no afectará al patrón
de herencia de otro. Esta afirmación sólo se cumple en aquellos genes
que no están ligados en diferentes cromosomas o que están en regiones
muy separadas del mismo cromosoma. Es decir, que siguen las proporciones
9:3:3:1.
Como consecuencia del principio de la
transmisión independiente, si consideramos dos caracteres a la vez, al
cruzar individuos dihíbridos de la F1 (híbridos para ambos caracteres),
en la segunda generación filial F2 aparecerán las proporciones 9(ambos
caracteres dominantes): 3(uno dominante):3(el otro dominante):1(ambos
caracteres recesivos).
Interpretación del experimento de Mendel:
Los resultados de las investigaciones de
Mendel, y en concreto esta tercera ley, refuerzan el concepto de que
los genes son independientes entre sí, y que no se mezclan ni
desaparecen en sucesivas generaciones. Para esta interpretación fue
completamente necesaria la elección de los caracteres pues, como dijimos
anteriormente, estos resultados no se cumplen siempre, sino solamente
cuando los dos caracteres a estudiar estén regulados por genes que se
encuentran en distintos cromosomas. No se cumple, por tanto, cuando los
dos genes considerados se encuentren en un mismo cromosoma.
Conclusiones
Gregor Mendel es considerado padre de la
genética moderna, a la que contribuyó enormemente con sus
investigaciones sobre herencia mediante la enunciación de las 3 leyes
aquí comentadas. En resumen, Mendel demostró que:
En la primera Ley, al realizar los cruces de dos razas puras, la primera generación filial resultarían heterocigotos y dominantes.
Con la segunda ley, al
cruzar unos ejemplares del resultado de la F1 observó que las
características que habían desaparecido en la primera generación,
volvían a manifestarse en la segunda generación.
En la tercera ley, se
hace referencia al caso de que se contemplen dos caracteres distintos.
Cada uno de ellos se transmite siguiendo de manera independiente las
leyes anteriores, como si no existiera presencia del otro carácter.